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Consultor Sr. THINK TALENT
La marca empleadora es la experiencia que una organización crea con sus colaboradores, la cual se transmite hacia afuera, contribuyendo a atraer el mejor talento, a la vez que se logra impulsar el engagement de los colaboradores actuales.
Desarrollar una estrategia de marca empleadora es un pilar clave en la guerra por el talento, y aunque se piensa que llevarla adelante es responsabilidad exclusiva de RRHH, tu rol como líder en la construcción de la misma, es más importante de lo que probablemente te imaginas.
A la hora de construir la marca empleadora de la empresa, el primer paso es definir cuáles son los atributos que tiene tu compañía, que la hacen atractiva para las personas que trabajan en ella, y que a la vez pueden resultar movilizadores para quienes están buscando nuevas oportunidades en el mundo laboral.
Cuando pensamos en estos atributos, vamos desde el propósito y valores de la organización y cómo se viven en el día a día, las posibilidades de desarrollo personal y profesional, el sentido de pertenencia a un equipo, nuestro enfoque sobre diversidad e inclusión, la dedicación a la salud y bienestar de los colaboradores, el balance de vida, los desafíos, y también la manera en que recompensamos, entre otros.
Un pulso realizado por Gartner a fines de 2020 acerca de lo que los colaboradores valoran y por ende lo que los impulsa a cambiar de trabajo, puso en primer lugar el estilo de liderazgo de sus jefes, seguido de aspectos de salud -lo cual no es extraño en plena pandemia-, y en tercer lugar las posibilidades de capacitación y desarrollo.
La crisis vivida recientemente expone que las personas valoran un estilo de liderazgo más humano, capaz de empatizar y comprender las emociones que atraviesan sus equipos, donde sus realidades personales puedan ser tenidas en cuenta.
Aquí es donde tus competencias como líder se ponen en juego a la hora de lograr un mayor engagement, y por ende afectar positivamente la marca empleadora de tu empresa. Desarrollar capacidades de escucha para comprender qué motiva a cada persona en tu equipo, qué es importante para cada uno de ellos, y contribuir al desarrollo de su plan futuro de crecimiento, como coach o como mentor, serán claves importantes.
También constituir equipos diversos, donde cada quien sienta que puede aportar desde su autenticidad, lo cual además es un activo importante para el pensamiento disruptivo que requiere la innovación en tiempos de cambio. A la vez, si el sentido de pertenencia a un equipo es importante, encontrar maneras de reconocer el desempeño grupal y la contribución de cada miembro al equipo, más allá de su propia performance individual, se vuelve relevante.
Como ves, gran parte de la creación de la experiencia que promueve el compromiso y que por ende crea una marca empleadora positiva también hacia el exterior, depende del estilo de liderazgo que logres desplegar, lo cual te vuelve protagonista de esa construcción. Es cierto que RRHH y la compañía pueden promover en mayor o menor medida sistemas y políticas que den un marco y herramientas para esto, pero finalmente la experiencia real se crea en los momentos de interacción que tienes con tu equipo, y que promueves entre ellos y el resto de la organización, por lo cual puedes ser artífice de esa experiencia y de las emociones que involucra.
No olvides que también puedes ser un poderoso embajador de marca hacia afuera. La guerra por el talento hoy es 100% digital y contar en el mundo de las redes, cómo es la vida en tu empresa, ponderando esos atributos que has sabido construir, y compartiéndolos con quienes mañana podrían elegir trabajar en tu empresa, es parte también de tu rol en la consolidación de la marca empleadora, como un líder de influencia.
Al fin y al cabo, atraer talento y sumar a los equipos personas alineadas a los valores y propósito de la organización, es parte central del rol de los líderes.
Matias Vila
Consultor Sr. Think Talent